Ubicación en el casco antiguo, limpieza diaria de la habitación, diseño acogedor

Las habitaciones extremadamente pequeñas ¡no hay espacio ni para las maletas!!! Además, la falta de perchas para colgar la ropa y los olores desagradables del desagüe son cuestiones que se deberían atender urgentemente.

ubicación excelente en el casco antiguo

La habitación tenía una decoración alegre y un ambiente acogedor, perfecto para relajarse. Además, el café de la cafetera en la habitación fue un detalle muy agradable para comenzar el día con energía. La vista a la ciudad era simplemente hermosa y me hizo disfrutar más de la estancia.

Sin embargo, la insonorización podría mejorarse, ya que se escuchaban los ruidos de las habitaciones contiguas.

La ubicación es excelente, en el casco histórico y muy cerca de la playa. La habitación es amplia, cómoda y la decoración alegre. Sin embargo, el aire acondicionado no funcionaba correctamente y hubo un momento incómodo con el dueño entrando a la habitación de manera intrusiva. La limpieza podría ser más exhaustiva, lo que afectó un poco la experiencia.

El hotel ofrece una cafetera en la habitación, ideal para disfrutar de un buen café por la mañana antes de salir a explorar.

La habitación era más pequeña de lo que parece en las fotos, ¡sin espacio ni para las maletas! El aire acondicionado falló y solo me ofrecieron un radiador pequeño, un detalle muy humillante. Por cierto, esperaba un trato preferencial, algo más que un cambio de habitación, pero parece que no soy especial aquí. Casi escribo una buena crítica, pero no pude.

Un encanto inesperado en el centro

La ubicación del hotel era simplemente perfecta, me encantó explorar el casco antiguo. Además, el personal fue siempre muy amable y servicial, haciéndome sentir como en casa.

Sin embargo, entraba mucha luz por un tragaluz, lo que dificultaba un buen descanso. El ruido de las habitaciones adyacentes también era bastante notable, lo que no ayudaba por la noche.

Excelente ubicación y buen confort

La verdad que me sorprendió lo bien ubicado que estaba todo. A 20 min de la playa y en el centro de Calpe. La habitación era bastante grande y limpia, lo que siempre se agradece. Aunque un poco más de insonorización no estaría mal porque se oía a los vecinos a veces. Ah, y la cafetería del piso de abajo tenía unos cafés que no te puedes perder.

La habitación era bastante amplia y estaba bien decorada. Tenía buena limpieza y el detalle de la cafetera fue un plus para disfrutar del café por las mañanas. Sin embargo, la cama era un poco pequeña y se hundía. noté que había algo de ruido, se escuchaban las conversaciones de las habitaciones cercanas, lo que no ayudó para descansar bien.

Ubicación excelente en el casco antiguo. Las habitaciones limpias y decoradas con encanto. La cama incómoda, se hundía hacia el centro. Muchas actividades para hacer, como paseos a la playa y alquiler de bicicletas. Algunas zonas ruidosas por la noche.

La ubicación en el casco antiguo es inmejorable, pero la habitación era algo ruidosa y podría mejorarse la insonorización. Aprecio la amabilidad del personal, que siempre estaba dispuesto a ayudar. Un detalle a considerar eran los amenities de la habitación, que añadieron un toque especial a la estancia.

Pasamos un gran rato con amigos, disfrutamos de las calas como Penyal y de las Bassetes. Hicimos actividades como ciclismo y exploramos el Parque Natural de Penyal d'Ifac. El lugar está muy bien ubicado en el casco antiguo, lo que facilitó nuestro acceso a diferentes atracciones. El personal es amable y siempre dispuesto a ayudar.

Un par de veces hubo un problema con el aire acondicionado, y el ruido externo se hacía notar, lo cual dificultó el descanso.

La habitación era amplia y la cama se hundía mucho.

La habitación era amplia y muy bien decorada, además contaba con una cafetera para un buen café por la mañana. Disfruté de la ubicación perfecta en el casco antiguo, ideal para explorar la zona.

me sentí muy cómodo, no tengo ninguna pega

Vaya festín! La carne fresca en los bares como Casa Mola Mola es para chuparse los dedos. No te pierdas los desayunos en el bar a 100 metros, a buen precio y con sabor a mar. Además, el recepcionista fue genial, siempre sonriente y dispuesto a ayudar.

Aunque el baño tenía un olorcillo raro que se disipó al abrir las ventanas, es un problemilla que no opaca lo que realmente brilla de este lugar.

Encanto en el casco antiguo y pet-friendly

La estancia fue muy agradable, destacando la amabilidad del personal y que aceptan mascotas sin coste adicional. La habitación era pequeña pero tenía el suficiente espacio para lo necesario y la limpieza era adecuada. Sin embargo, un detalle a mejorar sería la insonorización, ya que se escucha el movimiento de las habitaciones cercanas.